El martillo Total Select de 29mm (20oz) con mango de fibra de vidrio es una herramienta robusta y confiable diseñada para una amplia gama de tareas de trabajo en madera construcción y reparación. Con su diseño ergonómico y su construcción de alta calidad este martillo ofrece un rendimiento excepcional y duradero en cualquier entorno de trabajo.
Clavado y extracción de clavos
Trabajos de construcción y carpintería
Reparaciones domésticas y remodelaciones
Proyectos de bricolaje y renovación
Preparación del Área de Trabajo:
Antes de comenzar a usar el martillo asegúrate de tener un área de trabajo limpia y segura. Retira cualquier objeto suelto o peligroso que pueda interferir con tu trabajo.
Selección del Clavo:
Selecciona el clavo adecuado para tu tarea. Asegúrate de que el clavo sea del tamaño y tipo correctos para el material en el que estás trabajando.
Agarre Correcto del Martillo:
Sujeta el mango del martillo firmemente con una mano en la parte inferior del mango de fibra de vidrio cerca de la base. Asegúrate de tener un agarre seguro para un control óptimo.
Posicionamiento del Clavo:
Coloca el clavo en la posición deseada sobre la superficie en la que deseas clavarlo. Sujeta el clavo con la otra mano para mantenerlo en su lugar mientras golpeas.
Golpeo del Clavo:
Levanta el martillo con un movimiento suave y controlado sobre tu hombro manteniendo el ojo en el clavo para una precisión adecuada. Luego con un movimiento firme y controlado golpea el clavo con la cabeza del martillo.
Golpes Controlados:
Realiza golpes controlados y precisos para hundir el clavo en el material. Ajusta la fuerza de tus golpes según sea necesario para evitar dañar el material.
Extracción de Clavos:
Si necesitas extraer un clavo utiliza la parte posterior de la cabeza del martillo para palanquear suavemente el clavo fuera del material. Asegúrate de sujetar el martillo de manera segura y evitar lesiones.
Mantenimiento:
Después de su uso limpia el martillo para eliminar cualquier residuo de material y guárdalo en un lugar seguro y seco. Inspecciona periódicamente el martillo para detectar signos de desgaste o daños y reemplázalo si es necesario.